Vida y obra de Gustavo Adolfo Bécquer, romántico español di Alessia Sposato

- Del salón en el ángulo oscuro -


Rima VII


Del salón en el ángulo oscuro,

de su dueña tal vez olvidada,

silenciosa y cubierta de polvo

veíase el arpa.


¡Cuánta nota dormía en sus cuerdas,

como el pájaro duerme en sus ramas,

esperando la mano de nieve

que sabe arrancarlas!


¡Ay! - pensé - ¡Cuántas veces el genio

así duerme en el fondo del alma,

y una voz, como Lázaro, espera

que le diga: "¡Levántate y anda!"


ESTRUCTURA

El poema es uno de los más conocidos de Bécquer, sobretodo entre los que no tratan de amor. Se divide en tres estrofas. La primera es completamente ocupada por las imágenes que nos introducen a la presencia del arpa, punto focal de toda la composición, sobretodo desde el punto de vista del contenido. Llegamos a ver, literalmente, el instrumento gracias al empleo de la figura retórica del hipérbaton, que nos lleva de la mano a través del salón, hacia el ángulo oscuro, hasta la aparición del arpa, última palabra del verso y de la estrofa y que, por esta razón, representa el cúlmine de la estrofa misma ocupando una posición dominante.
En la segunda y en la tercera estrofa dos similitudes (la del pájaro y la de Lázaro, ambos dormidos) nos proporcionan la imagen de las notas antes y, consecuentemente, de la inspiración poética (el genio) como silentes, escondidas, durmientes. En particular las notas se comparan al pájaro (segunda estrofa), y luego la inspiración a las notas (véase el así duerme de la tercera estrofa), con añadido en la última de la segunda similitud (como Lázaro).


CONTENIDO

El tema de esta composición, como anticipado de alguna manera en el párrafo anterior, es el nacimiento de la inspiración poética. La concepción bécqueriana de la misma parece ser típicamente romántica: en el siglo XIX, de hecho, el genio se consideraba con un don misterioso, de origen casi divino. Esta idea es perfectamente representada aquí en la última estrofa, cuando Bécquer afirma que la inspiración poética está dormida en el fondo del alma y sólo espera que alguien, o mejor dicho quizás, algo, le permita despertar.

Esta concepción podría ser un interesante tema de debate en el aula. Se podría preguntar a los chicos si están de acuerdo con Bécquer, es decir si piensan que en el fondo de cualquier persona "duerma" un genio escondido que sólo espera que se le despierte; o si, al revés creen, como en la época siguiente afirmarán los positivistas, que el genio no nace autónomamente sino que crece y se construye gracias a la intervención y al influjo del contexto socio-cultural en el que vive una persona (factores familiares, ambientales, culturales, etc...).


Una propuesta didáctica para explotar este texto se puede encontrar aquí.

   5/11   

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Edurete.org Roberto Trinchero